Si tenéis un cachorro en casa, o estáis decididos a añadir un nuevo miembro a vuestra familia, hay ciertas cosas a tener en cuenta. Aquí os voy a intentar dar algunas pautas y consejos para la llegada del cachorro y como cuidarlo durante los primeros meses.
Preparativos:
Antes de que llegue el cachorro debéis acondicionar la casa para su llegada. Siempre
existen incidentes inesperados. No espere a que se presenten. Mejor guarde sus
zapatos y otros objetos mordibles en un lugar seguro.
Asegúrese
de que los productos venenosos de la casa están fuera de alcance. Detergentes desinfectantes, insecticidas, líquidos limpiadores, fertilizantes,
matamoscas, veneno para cucarachas, hormigas y ratones, todos son
potencialmente mortales. Tampoco deje cerca objetos cortantes o punzantes como
clavos, chinches alfileres o latas. No lo deje jugar con bolsas de plástico que
pueden asfixiarle.
Desenchufe,
retire o cubra cualquier cable eléctrico. Muchas plantas de interior y también
algunas de exterior pueden ser venenosas.
Como medida de precaución, tenga abundantes juguetes
apropiados para que su cachorro pueda mordisquear, pelotas de tenis, peluches,
huesos de cuero y demás artículos que podremos adquirir en veterinarias.
Su cama:
El
cachorro necesitará una cesta o una cama para perros en un lugar caliente y sin
corrientes. Una opción es poner una caja de cartón en un rincón para preparar
una cama cerrada. Añade algún material para la base que sea cálido y lavable,
como una manta o toallas viejas, así el perro tendrá un lugar acogedor.
Hay que respetar la privacidad y el espacio del perro. No te acerques a él y lo cojas sin más,
déjale que venga por sí mismo. No dejes que los niños le molesten o se burlen
de él y, sobre todo, nunca le envíes a su cesta cuando se haya portado mal,
porque de esta forma asociará ese lugar con un mal comportamiento y un
posterior castigo.
Como coger al cachorro:
Hay que procurar no coger al cachorro muy a menudo; ya que no podemos olvidar que su cuerpo es muy delicado, sobretodo si hablamos de perros de raza pequeña. Y a pesar que los perros de raza grande al ser cachorros parecen más fuertes, hay que tener en mente que son casi bebes y al igual que los humanos están en pleno crecimiento, con lo cual procurar tratarlos con cuidado, para que no les hagamos daño.
La manera de coger al cachorro, no es ni por el cuello (a pesar de que los padres los cojan así) ni de las patas. Lo correcto es poner una mano bajo su trasero y la otra bajo su pecho.
Elementos básicos para su cachorro:
- Un cuenco de agua y otro de comida.
- Un alimento nutritivo y específico para su etapa vital.
- Una cesta o cama.
- Cepillo y peine.
- Tarjeta de identificación (o microchip).
- Collar y correa.
- Champú, cepillo y pasta de dientes para perros.
- Juguetes seguros y de calidad para masticar que faciliten la dentición.
Paseos:
Las salidas de casa están totalmente prohibidas hasta
completar el calendario de vacunación. Una o dos vacunas no siempre protegen al
cachorro de enfermedades mortales como parvovirus y moquillo, en cada salida se
expone al perro a entrar en contacto con alguna de estas enfermedades ya que no
requiere estar junto con otro perro para enfermarse, la transmisión indirecta
por aire, manos contaminadas, etc., es muy común y puede acabar en una
situación muy difícil para usted y para su cachorro. Se puede sacar al cachorro
de forma más segura después de concluir su calendario de vacunación.
Veterinario:
La correcta atención sanitaria debería comenzar
inmediatamente y continuarla durante toda la vida del animal. Al igual que la
dieta y el ejercicio, el cuidado del cachorro implicará controles y visitas
periódicas al veterinario.
Los cachorros son susceptibles a cualquier enfermedad
contagiosa, por lo que es aconsejable realizar una visita temprana a tu
veterinario. Las primeras vacunas se administrarán ya a las 6-8 semanas de
vida. Para una protección completa, deberás volver al veterinario para que éste
le administre varias inyecciones. Normalmente suele ser recomendable llevar al cachorro al veterinario unos días después de que haya llegado a la casa, para que no os asocie con una situación traumática como suele ser la primera visita al veterinario.
Las vacunas son:
La primera es la de Parvovirus; dos semanas después se pone la del Moquillo canino, Adenovirus Tipo 2, Hepatitis Infecciona C y Leptospirosis. Y la seguda toma de Parvovirus. Un mes después de la segunda vacunación, hay que ponerle la tercera toma de Parvovirus y el microchip (se recomienda ponerlo). A partir de los cuatro meses se vacuna contra la Rabia.
Luego hay que repetir anualmente la vacuna Quintuple (Parvocirus
/ Moquillo / Hepatitis / Parainfluenza/ Leptosirosis) y Rabia.
Acostumbra al perro a ser tratado y hazle tú mismo los
controles periódicos. Comprueba sus ojos, orejas, boca, patas, uñas, piel y
pelaje. No dudes en consultar a tu veterinario si observas algo fuera de lo
normal.
Se DESPARASITA con cada vacunación porque además de eliminar
los parásitos, el antiparasitario estimula las defensas y ayuda a que la vacuna
produzca un mejor efecto inmunizante. Luego de terminado el plan de vacunación
se DESPARASITA en forma periódicacada 4 MESES y con cada revacunación.
Higiene y cuidados:
El baño es una parte fundamental del cuidado de nuestros
perros, sin embargo, cuando tenemos un cachorro que no tiene su calendario de
vacunación completo no es recomendable realizar este procedimiento, ya que
existen varias razones: no es algo “natural” para los perros, resulta
estresante, hay cambios de temperatura que los cachorros no controlan bien y
todo esto puede favorecer la presentación de enfermedades.
Para resolverlo existen baños de espuma que ayudan hasta
completar el calendario de medicina preventiva y posteriormente se pueden
realizar los baños cada dos o cuatro semanas con agua tibia y shampoo especial
para perros. El baño con jabón antipulgas sólo se debe aplicar cuando la
mascota tenga pulgas, el uso continuo puede provocar problemas en el pelaje.
Nutrición:
La nutrición en los cachorros es primordial, tenemos que recordar
que el crecimiento en los perros es muy acelerado y debemos ofrecerle un
alimento de buena calidad, de acuerdo a las características individuales de
cada ejemplar.
Las marcas comerciales premium (las que se venden en
veterinarias y tiendas de mascotas especializadas), están diseñadas para
garantizar los nutrientes de acuerdo a la edad y talla del cachorro, no sólo
cambian el tamaño de la croqueta, lo más importante es la formulación
específica para dar los nutrientes que demandan las mascotas, en función de sus
características específicas.
El alimento de cachorro se debe mantener como dieta única
hasta que nuestra mascota se convierta en adulto, en razas pequeñas puede ser
hasta el año, en razas medianas hasta el año y medio y las razas grandes y gigantes
hasta los dos años de edad; para determinar cuando realizar el cambio deberá
asesorarse con su veterinario.
Entrenamiento básico:
A nadie le gusta un perro desobediente e incontrolado, por
lo que cuanto antes comiences su entrenamiento, mejor. Muchos entrenadores
profesionales recomiendan una clase temprana de obediencia para facilitar el
proceso. Una de las primeras cosas que deberás enseñar a tu cachorro es a
reconocer su nombre. Utilízalo con tanta frecuencia como puedas para llamar su
atención: cuando le felicites y cuando le das de comer. Pronto aprenderá a
responder a su nombre cuando le llames. La repetición es importante cuando se
entrenan cachorros. Y recuerda que debes tener paciencia.
Algunos trucos para su entrenamiento son:
- Entrénalo dos veces al día, 5 minutos de duración.
- Para evitar la confusión, usa el mismo tono y palabras para ciertas órdenes. Ponte serio, para que tu cachorro aprenda que debe tomarse el entrenamiento en serio.
- Si pierdes la paciencia, tu cachorro lo percibirá y el entrenamiento será más difícil. Intenta estar calmado.
- Nunca golpees a tu cachorro, ni le levantes la voz. Usa los mismos elogios cuando proceda y un firme 'No' cuando debas corregirle.
- Termina las sesiones de entrenamiento con un comentario alegre.
Acostumbra a tu cachorro a llevar un collar blando desde el
principio. Después de un tiempo, añade una correa corta y ligera y déjate
llevar por él sin tirar de ella durante algunos días. El objetivo es
acostumbrarle a caminar contigo sin que tire. Si corre, o se retrasa, un suave
tirón es todo lo que deberás hacer. Quédate cerca de él para que no sienta
deseos de soltarse.
Algunos perros como los Golden no se recomienda que se les deje el collar todo el día, ya que se les acaban recortando el pelo del cuello. Por lo tanto se les debe dejar el collar durante unos minutos al día, varias veces, para que se vayan acostumbrando a él; y una vez este cómodo con el collar, solo ponerselo para salir de paseo. Hay que lograr que el perro asocie el collar con pasárselo bien, y salir de paseo como algo divertido
Fuentes: