La ballena pertenece al orden de los cetáceos. Las ballenas son los mamíferos marinos más grandes de la Tierra. Su adaptación al agua es tal, que parecen pertenecer a la familia de los peces. Pero según nos indica la investigación científica, y según sus esqueletos, las ballenas descienden de animales terrestres con cuatro extremidades.
Dentro de los cetáceos existen dos grandes grupos:
Las ballenas con barbas: En este grupo se incluyen las ballenas de gran tamaño, como el caso de la ballena azul. Esta clase de cetáceos se caracterizan por tener barbas en lugar de dientes. Estas barbas las utilizan para filtrar el agua y así poder atrapar el alimento. El número de barbas que poseen oscila entre 160 y 360 en cada lado de la mandíbula y éstas presentan en su borde interior un aspecto filamentoso. Otro rasgo de este grupo es que cuentan con un respiradero doble.
Las ballenas pertenecientes a este gran grupo suelen pasar el verano en las aguas polares, donde abunda el plancton. Antes que llegue el invierno emigran hacia zonas templadas y tropicales. Allí pasan el invierno y se reproducen.
Las ballenas dentadas: Las características de este grupo son que suelen tener entre 1 y 260 dientes, que utilizan para retener el alimento. Sólo tienen un orificio para respirar y poseen la habilidad para la ecolocación. La mayoría de las ballenas pequeñas, delfines y marsopas, pertenecen a este grupo. Un ejemplo de ballena con dientes es el cachalote.
Características:
Las ballenas hembra son siempre más grandes que los machos. Poseen un largo cráneo de hasta un tercio de la longitud total de su cuerpo, que en estado adulto mide de 15 a 17 metros y pesa de 50 a 80 toneladas. Poseen un estrecho y arqueado maxilar, lo que da a estos animales un perfil convexo. Esta forma permite la presencia de largas barbas. Su dieta consiste de pequeños crustáceos, principalmente copépodos, aunque algunas especies también comen importante cantidad de krill.
Presentan una construcción robusta en comparación con los rorcuales, careciendo de pliegues gulares y aleta dorsal. El cuerpo de la ballena está recubierto de una capa de grasa espesa que mantiene su temperatura corporal en una media de 36 grados. La coloración y forma de la cola varía de una ballena a otra y es tan importante para distinguirlas e identificarlas como lo puede ser la huella digital en las personas.
La caza de las Ballenas:
Los primeros registros de esta actividad se remontan al menos al 3.000 A.C. Varias comunidades costeras desde hace mucho tiempo han cazado y recolectado ballenas varadas para su subsistencia. La caza industrial de las ballenas comenzó en el siglo XVII. A principios del siglo XX el uso de la tecnología y el aumento en la demanda de recursos superaron el límite sostenible por las ballenas, causando el descenso en las poblaciones de estas. En la década de 1930, cada año más de 50.000 ballenas fueron asesinadas.
La CBI en uno de sus artículos permite a los estados miembros cazar ballenas con fines científicos, este artículo no fija límites al número de ballenas a cazar. Japón aprovecha para cazar anualmente 440 ballenas minke en la Antártida, y 100 en el Pacífico Norte, no hay dudas de que no es necesario matar más de 540 ballenas (el 10 % están preñadas) con ningún fin científico. La carne de estas ballenas termina en el plato de lujosos restaurantes de Japón.
La cacería de Japón y Noruega es parte de un plan estratégico que promueve la reasunción de la caza ballenera a gran escala y sobre todas las especies. Ya que para Japón: "Las ballenas se comen todos los peces, y dejan sin recursos ícticos a los humanos", o, "Hay superpoblación de ballenas".
Fuentes: